Repostería Casera (¡Y Creativa!): noviembre 2017

viernes, 24 de noviembre de 2017

Tarta de queso y calabaza

¡Hola de nuevo amigos!

Ha llegado uno de los momentos que mas nos gustan del año, el otoño y con él la ¡¡ÉPOCA DE CALABAZAS!!

Creo que todos los que nos venís leyendo habitualmente que nos encanta la calabaza y usarla para los postres, así que ahora que ya tenemos no hemos podido resistir la tentación, ademas hemos juntado nuestro amor por la calabaza con nuestro otro amor, EL QUESO y hemos hecho una super chessecake de calabaza.

Os contamos como hacerla, ya vereis que no es muy díficil.

Ingredientes:

- Base de galleta

180 g de galletas tipoMaría
Una cda. de azúcar
Dos cdas. de mantequilla ablandada

- Relleno de queso y calabaza

200 g de puré de calabaza (o 250 g de calabaza fresca)
350 g de queso crema
130 g de azúcar
1/2 teaspoon de extracto de vainilla
Dos huevos grandes
35 g de harina de repostería
1/4 teaspoon de canela molida
Un pellizco de nuez moscada rallada

Elaboración:

Empezamos por preparar la base de la tarta con las galletas. Pesamos las galletas, las ponemos en una batidora y las trituramos. Si no tenemos batidora se puede hacer metiendo las galletas en una bolsa de plástico hermética y aplastando con un rodillo.

Mezclamos el azúcar y la mantequilla ablandada con las migas de galletas, hasta que esté homogéneo.

Forramos con papel de hornear el fondo de un molde desmontable de 20 cm y extendemos las migas de galleta. Presionamos con los dedos para compactarlo e igualarlo por toda la superficie.

Metemos el molde en el horno a 160 ºC (con aire) / 180 ºC (sin aire) y cocemos la base unos 10 minutos. La sacamos y dejamos que se temple.

Pesamos la calabaza fresca, la ponemos en un bol y la cocemos en el microondas, tapada, unos 4-5 minutos, dependerá de la potencia de vuestro microondas. Debe quedar tierna. Igualmente podemos cocerla en algo de agua.

Ponemos los huevos en la batidora y agregamos la calabaza cocinada. Batimos hasta que la mezcla esté fina. Añadimos entonces el queso crema y el azúcar. Mezclamos bien hasta homogeneizar.

En un bol pesamos la harina y agregamos la sal y las especias: la canela molida y la nuez moscada rallada. Agregamos los sólidos a la batidora y volvemos a mezclar bien.

Envolvemos el molde en papel aluminio para asegurarnos de que no entre el agua del baño maría. Forramos el lateral con tiras de papel de hornear para desprender bien la tarta después.

Vertemos la mezcla en el molde; las tiras de papel se pegan a la pared por la propia fuerza que ejerce la masa, aunque si queréis colocarlas con mayor firmeza podemos untarlas de abundante mantequilla blanda y pegarlas a la pared.

Metemos una fuente en el horno donde quepa el molde holgadamente. Si queremos que la tarta no se nos tueste por encima y quede más uniforme de color, tapamos también el molde con un pedazo de papel aluminio, cuidando de no torcer las tiras de papel laterales.

Preparamos suficiente agua hirviendo y colocamos el molde en el horno a 155 ºC (con aire) / 175 ºC (sin aire). Vertemos el agua hirviendo en la fuente y cerramos el horno. Cocemos la tarta una hora y 15 minutos, como mínimo.

Al cabo de ese tiempo comprobamos si la tarta está hecha en el centro con una brocheta. Si es así, apagamos el horno y la dejamos 30 minutos más dentro. Luego entreabrimos la puerta para que se vaya enfriando poco a poco. Con este enfriamiento lento conseguimos que la superficie no se agriete.

Sacamos el molde y dejamos que se enfríe la tarta por completo a temperatura ambiente, sin destaparla.

Sólo nos queda un paso, que es el más importante, consiste en partir un trozo, ponerlo en un plato y ¡devorarlo con una cucharilla!

Esperamos que os haya gustado la receta y que si os surge alguna duda o pregunta que hacernos, aquí estamos para vosotros.

Muchas gracias por leernos, ¡hasta la semana que viene!

Un saludo.
Repostería Casera PM
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reposteriacaserapm.webnode.es
@Repos_Casera_PM

viernes, 17 de noviembre de 2017

Tarta de chocolate y pretzels

¡Hola a todos!

Esta semana os traemos una receta un poco especial, después de la publicación de nuestras (nombre de la entrada anterior) tuvimos un par de pedidos a los que el bizcocho les encanto, entre ellos un chocoadicto que nos pidió que le hiciéramos una tarta con ese mismo bizcocho pero le añadiéramos un toque diferente.

Siguiendo su petición hemos usado el bizcocho de chocolate que nos ha dado para una tarta de 18 cm que es justo lo que él necesitaba, la hemos cubierto con un buttercream de mantequilla de cacahuete muy muy suave y lo hemos decorado con pretzels de diferentes formas a lo largo de toda la tarta. Además hemos derretido chocolate y lo hemos distribuido en hilo por encima de la tarta dando un toque y un efecto precioso.

No vamos a extendernos mucho con la elaboración del bizcocho porque lo tenéis muy reciente pero os dejamos el enlace a la entrada anterior para que podáis echarle un ojo con mas detenimiento.

Recordad ajustar las cantidades para que os quede perfecto, o podéis aprovechar la masa sobrante par realizar otra elaboración.

Para hacer la buttercream super suave hemos usado:

125 gr de mantequilla de cacahuete
25 gr de mantequilla
25 gr de queso de untar
75 gr de azúcar glas
Un chorrito de nata de montar

Batimos las mantequillas hasta que empiecen a clarear un poco, añadimos el queso y seguimos batiendo hasta que se integre, añadimos el azúcar y batimos hasta que endurezca un poco.

Añadimos la nata y continuamos batiendo. Dejamos enfriar 10 o 15 minutos y ya la tenemos.

Cubrimos la tarta y alisamos hasta que quede perfecto, entonces pasamos la espátula serrada por el lateral dejando unas muescas.

Vamos a decorar como habéis podido adivinar en el título con pretzels pequeñitos y palitos salados del mismo estilo para continuar con esa mezcla de dulce-salado.

Pegamos los pretzels en línea hasta el centro de la tarta en el cual clavaremos los palitos ya mencionados. Derretimos unas onzas de chocolate y las repartimos a hilo por encima de los pretzels, los palillos y el borde de la tarta.

¡Y listo! Tenemos una pedazo de tarta deliciosa, con dos de nuestros ingredientes preferidos y un toque muy especial con la decoración de pretzels.

viernes, 10 de noviembre de 2017

Bizcochitos de chocolate y crema de queso.

¡Hola de nuevo amigos!

Esta semana hemos hecho unos pequeños postres individuales que la verdad, ¡estan deliciosos!

Consisten en unos bizcochitos de chocolate con forma de minidonut colocados encima de una placa redonda de crumble de chocolate y coronados con una crema de queso y frambuesa.

Entre el crumble y el bizcochito hemos rellenado con crema de limón que nos sobró de la tarta que hicimos la semana pasada y en el hueco del bizcochito-donut hemos puesto una generosa cantidad de mermelada casera de frambuesas.

Para rematar, hemos coronado el bizcochito con una crema de queso y mermelada de frambuesa como la que hemos usado en el hueco del "donut".

Una vez que os hemos contado todos los recovecos de estas pequeñas maravillas os explicamos las elaboraciones que hemos llevado a cabo.

Vamos a empezar con el bizcocho de chocolate.

La receta, como vais a ver, es una receta para un bizcocho en molde de 20 cm redondo, pero os la vamos a dar porque la hemos aprovechado para hacer esta receta y una tarta que os enseñaremos la semana que viene.

Necesitamos para este bizcocho:

260 gr de harina
70 gr de cacao
2 tsp. de café soluble
1 tsp. de levadura
2 tsp. de bicarbonato
1 tsp. de sal
155 ml de aceite de girasol
200 gr de azúcar blanco
200 gr de azúcar moreno
3 huevos
1 tsp. de vainilla
250 gr de yogur natural
250 ml de agua caliente

Calentamos el horno a 170º C. con calor arriba y abajo y preparamos el molde de minidonuts.

Tamizamos la harina, el cacao, el café instantáneo, la levadura química, el bicarbonato sódico y la sal.

Reservamos.

Batimos el aceite con los dos tipos de azúcar en un robot de cocina (o con una varillas eléctricas), dos minutos aproximadamente a velocidad media, y vamos añadiendo los huevos, y el extracto de vainilla.

Incorporamos la harina alternándola con el yogur en tres partes mientras el robot continua batiendo a baja velocidad, y por último añadimos el agua caliente en forma de hilo.

Echamos la masa en el molde (la que quepa en el de minidonuts, el resto reservamos) y horneamos 16 minutos

Retiramos del horno, dejamos reposar 15 minutos y desmoldamos. Dejamos enfriar en una rejilla.

Mientras enfría hacemos la masa de las galletas.

Batimos en el robot de cocina todo junto: 375 gr de harina, 125 gr de almendra molida, 250 gr de azúcar y 50 gr de cacao. Cuando esté bien mezclado vamos añadiendo 250 gr de mantequilla en taquitos y en punto de pomada hasta que se forme una masa. Dejamos reposar 5 minutos.

Pasados esos 10 minutos estiramos una parte, cortamos unos círculos más o menos del tamaño de los donuts de bizcocho y los dejamos enfriar una media hora en la nevera para que al hornearlos no pierdan la forma.

Los horneamos durante 14 minutos con calor arriba y abajo a 180 ºC y dejamos reposar en bandeja para que no pierdan la forma.

Mientras se enfrían las galletas montamos la crema de queso con 125 gr de queso de untar, 50 gr de mantequilla, una cucharada sopera de mermelada de frambuesas, 50 gr de azúcar glas y unos 50 ml de nata de montar.

Una vez frías las galletas, cubrimos con la crema de limón, montamos los donuts, rellenamos el agujero con la mermelada y decoramos con la crema de queso y una boquilla estrellada.

Rematamos con unas bolitas de azúcar de color plateado y ¡listo!

Parece una receta un poco compleja porque lleva varias partes, pero ya veréis como si os ponéis con ella es muy facilita y creednos, vale mucho la pena.

viernes, 3 de noviembre de 2017

Tarta de vainilla y limon "Frozen" especial para alergicos

¡Hola a todos!

Hoy os traemos una super receta especial para todas aquellas personas que tienen alergias al huevo y/o leche y sus derivados. Actualmente hay cada vez mas personas con alergias y nosotros queremos contribuir con otra maravillosa receta para ayudar a endulzar las vidas de todas las personas.

La receta de hoy es para el cumple de una pequeña que cumple 5 añitos y que como habréis adivinado tiene alergia al huevo y a la proteína de la leche por lo que estas recetas siempre las hacemos con mil ojos revisando cada uno de los ingredientes con mucho cuidado.

Empezamos precalentando el horno a 170 ºC con calor sólo en la parte de abajo.

Para hacer el bizcocho hemos usado:

450 gr de harina
15 gr de levadura
330 gr de azúcar
195 ml de aceite de girasol
300 ml de leche de almendras
Un chorro de aroma de vainilla blanca especial sin alérgenos lácteos

Mezclamos por una parte la harina, la levadura y el azúcar, y por otra parte el aceite, el aroma y la leche de almendra.

Vertemos los líquidos en el bol de los sólidos y movemos hasta que todos los ingredientes estén integrados.

Engrasamos el molde redondo de 26 cm y horneamos 10 minutos con calor solo abajo y luego 30 minutos con calor arriba y abajo.

Una vez horneado, dejamos enfriar 10 minutos en el molde y desmoldamos. Dejamos enfriar en rejilla.

Mientras se enfría el bizcocho hacemos el relleno, que en esta ocasión va a ser una crema de limón.

Exprimimos 4 limones y colamos el zumo. Lo ponemos al fuego en un cazo con 100 gr de margarina de coco (sin rastro de proteína de leche) y 250 gr de azúcar blanco, calentamos hasta que se derrita la margarina y entonces sacamos un poco del líquido caliente y en un bol disolvemos 30 gr de maizena con ese zumo caliente. Una vez disuelto y bien homogéneo lo añadimos al resto del zumo caliente y movemos bien hasta que empiece a espesar. Es posible que tarde un poco, pero mantenemos el fuego estable y movemos continuamente.


Ésta es la mezcla de zumo con maizena

Y ésta es la mezcla del zumo con la margarina y el azúcar

Cuando empiece a espesar lo sacamos del fuego y dejamos enfriar, se espesará mas.

A estas alturas tendremos el bizcocho frío, por lo que le cortamos en dos capas.

Como la crema de limón seguirá un poco caliente la metemos un poco en la nevera y mientras vamos montando la nata. Empezamos tiñendola de azul y luego la montamos con la batidora de varillas. No hace falta añadir azúcar porque la nata vegetal ya tiene un dulzor propio.

Nos ponemos a montar la tarta, cubrimos el primer piso con crema de limón, tapamos con la segunda capa de bizcocho y cubrimos ésta con más crema de limón y en ella pegamos la imagen de la película Frozen que hemos impreso en papel de arroz en una tienda especializada.

Pasamos la nata montada a una manga con boquilla de estrella y decoramos alrededor de la imagen con rosas. Rematamos la base del bizcocho con mas decoraciones de nata y dejamos enfriar y que endurezca un poquito.

¡Y listo! Tenemos terminada una tarta preciosa, sin rastro de proteína de leche ni huevo para que una nena pueda disfrutar de su cumple tranquilamente y pueda disfrutar de su tarta.